Esta claro que pensar que tu jefe es un demonio y que tu equipo de trabajo es realmente grimoso no va ayudar a mejorar tu estado de ánimo. Asi que lo mejor será pensar que tienes un superior que realmente se preocupa de tí, que te mima en sabios consejos y que siempre estará dispuesto a que aprendas más de la cuenta, como los viejos o los padres (digase en su defecto, los reyes magos).
Tambien pensaré que el grupo de trabajadores que están en mi mismo nivel son realmente agradables, que tienen unas conversación filosóficas más alla del futbol o de lo mucho que se enborrachan los viernes, tambien pensaré que su modo de combinar corbatas (cutres) y camisas (cutres) es una manera de monstrar su indibidualismo y forma original de expresarse.
Viva el pensamiento positivo dictatorial que me domina.
Y viva Melody que va a ganar Eurovisión: